20 años de electroestimulación neuromuscular en EPOC
Resumen
- El problema: La EPOC provoca una disfunción muscular en las extremidades que genera un círculo vicioso: la disnea (sensación de ahogo) limita la actividad física, lo que lleva a un desacondicionamiento y atrofia muscular, que a su vez empeora la capacidad de ejercicio y la calidad de vida. Muchos pacientes severos no pueden realizar ejercicio convencional.
- La solución aplicada: Este estudio es una revisión de 20 años de investigación sobre la Estimulación Eléctrica Neuromuscular (NMES). Los protocolos analizados suelen utilizar corrientes bifásicas simétricas con frecuencias entre 35 Hz y 75 Hz, aplicadas en sesiones de 20 a 60 minutos, varias veces por semana (de 3 a 5), durante 4 a 8 semanas. El objetivo es contraer los músculos de las piernas de forma pasiva, sin generar demanda cardiorrespiratoria y, por tanto, sin provocar disnea.
- El resultado principal: A pesar de la heterogeneidad en los estudios, la evidencia global concluye que la NMES es un medio eficaz para mejorar la fuerza del cuádriceps y la capacidad de ejercicio en pacientes con EPOC. Actúa como una herramienta clave para romper el ciclo de inactividad-disnea, especialmente en aquellos pacientes más debilitados.
¿Crees que esta información puede ser útil?